Etiquetas

8 de enero de 2012

¿Cuándo repetiremos?

Llegamos a su casa sobre las 21:30. La mesa estaba preparada y la cena casi lista. Se notaba que se habían esforzado para que todo saliera bien y así fue. La cena estaba deliciosa y la tertulia que la siguió aún mejor.
Las botellas de licores se iban agotando mientras jugábamos al “yo nunca”, destapando intimidades y calentando poco a poco el ambiente.
No recuerdo quién fue el que propuso ir al sofá, pero fue la mejor idea de la noche. No creo que tardáramos ni un segundo después de tumbarnos en buscar la boca de nuestros anfitriones, dejando volar las manos y, en un suspiro, había ya cuatro cuerpos desnudos retozando en el sofá.
Tenían unos cuerpazos de infarto los dos y nos dedicamos a recorrerlos, cada milímetro, disfrutando de sus cuerpos, de su ímpetu y de sus ganas de gozar y disfrutar de una noche mágica.
-Pero que chico tan travieso.
Le decía ella a Loure mientras el otro chico calbagaba sobre Alba haciéndola gritar y gemir de placer.
Nos dieron las tantas de la madrugada totalmente exhaustos y empapados en sudor.
¿Cuándo repetiremos?

No hay comentarios: