Después de 3 intentos fallidos (el primero por la gripe, el segundo una visita inesperada, el tercero la regla anticipada)… ¡por fin!, a la 4ª fue la vencida.
Luego de una cena animada y una charla divertida tomando unas copas nos fuimos a casa. Para nuestra invitada era la primera vez que hacía un trío y estaba súper excitada y con unas ganas terribles de probar y disfrutar.
Como era nuestra invitada especial la desnudamos lentamente y las tumbamos en la cama. La untamos de aceite de masaje con olor a canela y comenzamos a masajearla, que notara 4 manos recorriendo su cuerpo, cada centímetro de piel, para terminar lamiéndola de arriba abajo hasta detenernos las dos bocas, las dos lenguas en su coñito depilado.
Lo siguiente era que probara a otra mujer. Las dos se pusieron de rodillas, enfrentadas sobre la cama, mientras se besaban y acariciaban contribuyendo a que su excitación continuara subiendo. Llegó el momento de que nuestra invitada probara un coñito.
Tumbó a “Ella” sobre la cama y se lanzó a comerle el coñito, también depilado, mientras “Él” la miraba fijamente y la ayudaba a abrir las piernas de “Ella”, mostrándole todo el coñito y el culito para que lo besara, lo lamiera, … lo comiera firme y sabrosamente, disfrutando del momento.
Así continuó la velada… nosotros disfrutando de nuestra amiga y ella haciendo realidad su fantasía.
Lo bueno es que una vez cumplida una aparecen nuevas fantasías por hacer realidad!!!
